Con motivo de la prolongada sequía que afecta a la zona norte del país, en especial al estado de Chihuahua y a la ocurrencia de incendios forestales debilitó los árboles en el macizo forestal de la entidad, desde el año pasado se detectó la presencia del “Dendroctonus Mexicanus” y el “Ipslecontei”, insectos descortezadores de las diversas variedades de pinos, ante esta problemática, el Gobierno del Estado ha destinado recursos económicos para apuntalar la campaña de control y combate de esta plaga.
Debido a lo anterior, este miércoles, en la ciudad de México, D.F., durante el segundo periodo de sesiones ordinarias del primer año de ejercicio de la LXII legislatura del Congreso de la Unión, los diputados federales sometieron a dictamen de discusión, el punto de acuerdo en el que se propone que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como la Comisión Nacional Forestal, realicen las acciones pertinentes, para controlar y erradicar esta plaga.
En tanto que la Semarnat entregó notificaciones de saneamiento a titulares de ejidos y dueños particulares, emplazándolos a realizar los trabajos para frenar el avance de los insectos, mediante la aplicación del “control mecánico” de los pinos plagados, que implica derribarlos, trocearlos, descortezarlos y quemar cortezas, puntas y ramas, además incluye descortezar el tocón o tronco base, así como la aplicación de insecticidas y un adherente fijador. Sin embargo, se requiere implementar acciones más radicales para limpiar totalmente de esta plaga el macizo boscoso de la entidad y evitar que siga afectando a más árboles.
Este acuerdo, fue suscrito por la Diputada Minerva Castillo Rodríguez y diversos diputados integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, en virtud de que el insecto invadió inicialmente predios ubicados en los municipios de Balleza, Guachochi y Guadalupe y Calvo, pero en 2012 se extendió a territorios forestales de Nonoava, Carichí, Bocoyna, Guerrero, Riva Palacio y Madera.
Esta plaga, que afecta a cerca de 22 mil hectáreas de la superficie forestal, equivalente al 0.12 por ciento, en relación con las 17 millones 527 mil 831 hectáreas de bosque con que cuenta el territorio estatal, es una afectación mínima, sin embargo, se está convirtiendo en el problema fitosanitario más grande en el desarrollo forestal del estado, pues la superficie boscosa afectada por plagas está aumentando día a día en los 9 municipios afectados.
Desde finales del mes de agosto del año pasado, la CONAFOR confirmó la presencia de insectos descortezadores que afectan varias especies de pino, entre éstas se encuentran el pino piñonero, prieto, real (engelmannii), arizónica, ayacahuite, herrerai y durangensis. De acuerdo con los informes técnicos, en las masas forestales de Balleza, Guachochi y Guadalupe y Calvo se han alojado insectos de las variedades “Ips lecontei” “Dendroctonus mexicanus” y “Dendroctonus pseudotsugae”, respectivamente. En Carichí está presente el descortezador Ips, mientras que en Bocoyna es el Dendroctonus mexicanus.
Se está requiriendo la suma de los productores forestales con base en lo previsto en el Artículo 121 de la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable, en el que se señala que están obligados a ejecutar los trabajos de sanidad forestal, hecho que implica cubrir los gastos que esta actividad genere.
Como una acción adicional, el Comité de Sanidad, integrado por la Conafor, Semarnat, Gobierno del Estado, Profepa, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agropecuarias y Pecuarias, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, y la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales de la UACH, había acordado que personal de Profepa y Gobierno del Estado realicen inspecciones en aserraderos que están recibiendo trocería, en cuya corteza se estarían alojando los insectos, por lo que era necesario aplicar insecticida para controlarlos, o remover la corteza y quemarla.